Las perlas de los políticos: Más hipocresía

El Sr. de la Riva, alcalde de Valladolid, ha saltado nuevamente a la palestra por sus declaraciones sobre la flamante ministra de sanidad, Dª Leire Pajín; las reproduzco por si alguien no las había leído con anterioridad

"Cada vez que le veo la cara [a Leire Pajín] y esos morritos pienso lo mismo".

No es la única perla verbal del ínclito alcalde, que comparó en su día, las actuaciones del juez Garzón con las bombas de ETA:

"Desgraciadamente, igual que la bomba de ETA es algo habitual, las actuaciones del juez Garzón también", "siempre destapa algo antes de las elecciones que al final se queda en agua de borrajas, pero ya el daño está hecho".

No tiene razón el edil, y menos aún en la forma, pero sí es verdad el desprecio que representa para los profesionales de la sanidad, tener al frente del sector a una política tan joven como inexperta en este tema tan específico y con una formación académica que no la acerca tampoco demasiado. Pajín no me parece la persona idónea para el cargo y, en este mismo espacio, en un comentario, afirmé que no era guapa. La verdad es que no se deben mezclar las churras con las merinas, y lo físico no es determinante para juzgar su labor; el tiempo dirá si tengo o no razón sobre el particular.

Rubalcaba destapó el tarro de las esencias para cuestionar la posición del PP sobre los derechos de la mujer, en un ejercicio de malabarismo e hipocresía propios del individuo; parece una estupidez que una persona supuestamente inteligente cuestiona la filosofía de un partido por los exabruptos puntuales de alguno de sus miembros. El País lo recogía de este modo:

Preguntado sobre la cuestión al término de su primera rueda de prensa como portavoz del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba ha calificado de "repulsivas" las declaraciones del alcalde popular. "Éste es el primer calificativo que me viene a la cabeza", ha añadido Rubalcaba, a quien lo que más preocupa no es las declaraciones machistas que de tanto en tanto hace el regidor sino que sucede también con otros líderes del PP. "No es la primera vez que se escuchan expresiones de barra de cantina o más sofisticadas contra las mujeres a dirigentes del PP", ha indicado Rubalcaba, que ha pedido al PP que aclare a los ciudadanos cuál es su postura sobre los derechos de la mujer.

Conspicuos socialistas se tiraron al monte después de oír la perla del alcalde, y aprovecharon la ocasión para escandalizarse debidamente. Sin embargo, una socialista solidaria y demócrata, Dª Elena Valenciano, publicaba en su blog lo siguiente:

“Pasando por Aznar y su dedo en el aire, sus musculitos y pulseritas de cuero, paseando su rencor por el mundo”.

Esta misma señora califica al PP de “Carajillo Party” en su espacio insistiendo en que son capaces de hacer daño al país por su propio interés, ahí es nada, y recoge fotografías de Aguirre en calcetines, en el hotel de Bombay y de la boda de la hija de Aznar.

La referencia a los musculitos de Aznar es, cuando menos, tan desacertada como el comentario sobre los labios de Dª Leire, aunque éste resulta obviamente más grosero; la diferencia estriba en que el grito en el cielo ya está puesto sin que nadie se haya parado a pensar si tiene el derecho a tirar la primera piedra. Esa es la naturaleza de nuestra clase política en general, que hace buena la frase de un amigo que calificaba la democracia como la dictadura de los listos. Si tenemos en cuenta la partitocracia, las listas cerradas, la ley D’Hont y tantas otras cosas, nos percataremos además, de que los listos no siempre son los inteligentes y ahí es donde radica el verdadero problema.