El pasado mes de Diciembre se autorizó en España la circulación de «megacamiones», vehículos que pueden exceder el máximo de longitud permitido hasta entonces, que se encontraba establecido en 18.75 metros; actualmente pueden medir 25 metros y pesar 60 toneladas. Parece ser que su ámbito de actuación se restringirá a autopistas, al fin y al cabo uno, asturiano, no se imagina un camión de tal envergadura bajando cargado el puerto de Pajares un día con mal tiempo, pero aún así, el adelantamiento de un automóvil será largo y constituirá una experiencia diferente. Todo sea por el progreso, pero debemos esperar a valorar, dentro de unos meses, la incidencia en la siniestralidad, posiblemente dependiente de las exigencias administrativas para ponerse al volante de un monstruo con esta longitud y tonelaje.
Las dos caras de la verdad 
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